La falta de vivienda es una crisis humana que no tiene fácil solución. Pero gracias a un innovador programa del Ford Motor Company Fund, SOS obtendrá nuevas ideas para impulsar su misión en el futuro.
Como parte del programa de liderazgo corporativo Treinta menores de 30 del fabricante de automóviles, un grupo de élite de becarios de Ford pasará un año trabajando junto al personal de SOS para aprender los entresijos de la gestión de una organización sin ánimo de lucro, así como para ayudar a SOS a desarrollar estrategias para conectar con las generaciones más jóvenes, que representan una futura base de donantes y voluntarios.
Todos salimos ganando.
“Estamos encantados de formar parte del compromiso de Ford de compartir el talento prometedor de su empresa con organizaciones como la nuestra, que trabajan para hacer frente a la tragedia de la falta de vivienda y la inseguridad habitacional en nuestras comunidades”, declaró Ryan Hertz, presidente y director general de SOS.
El programa Ford Treinta menores de 30 es un curso polifacético que capacita a 30 jóvenes empleados para trabajar y aprender sobre organizaciones sin ánimo de lucro como SOS. El objetivo: convertir a los jóvenes talentos de Ford en líderes al servicio de sus comunidades.
Elegidos entre cientos de aspirantes de Ford que desean marcar la diferencia en la vida de los demás, los 30 becarios tienen experiencia en informática, servicios financieros, ingeniería y marketing. Cada año, el programa se centrará en un tema social diferente, siendo el de este año las personas sin hogar y la vivienda asequible.
“Los problemas de los sin techo, la vivienda asequible y el refugio inciden en las necesidades básicas de la comunidad y ofrecen una visión más profunda de la pobreza sistémica a la que se enfrentan muchas personas”, declaró René Palileo, director del programa Treinta menores de 30 años. “Para el Fondo Ford, nuestra estrategia es asegurarnos de que los recursos de los que somos responsables se inviertan en programas y organismos que proporcionen un mayor acceso a los necesitados”.
Los jóvenes becarios Ford se reunirán con el personal de SOS entre cuatro y seis veces a lo largo del programa y realizarán labores de voluntariado de forma continuada. De hecho, Palileo afirmó que muchos antiguos becarios del Fondo Ford han seguido trabajando como voluntarios en sus organismos asociados mucho después de finalizar su participación en el programa.
Además, pondrán al servicio de SOS su recién adquirida capacidad de resolución de problemas eligiendo un programa o iniciativa existente para mejorarlo o ampliarlo.
“El proceso Design Thinking que se enseña a través de este programa dota a nuestros empleados de una nueva forma de resolver problemas: replantear los retos y perfeccionar las soluciones”, añadió Palileo. “Queremos que nuestros becarios aprendan a aportar algo útil a nuestros socios de las agencias”.
Sea cual sea la iniciativa SOS en la que decidan centrarse estas mentes milenarias, es muy probable que la tecnología desempeñe un papel importante.
“Los diversos sistemas que han fallado a nuestros vecinos son complejos, y hará falta algo más que financiación para responder adecuadamente a sus necesidades”, afirmó Hertz. “Apreciamos la voluntad del Fondo Ford de apoyar nuestra misión de esta manera única y esperamos trabajar con nuestros becarios para ver nuestros programas bajo una nueva luz.”
Esta asociación de intercambio de conocimientos tendrá sin duda un efecto dominó que irá mucho más allá del personal de SOS y de los becarios implicados.
Y así debe ser, si el objetivo final es garantizar que todos nuestros vecinos tengan acceso a una vivienda segura y asequible.
¿Quieres ayudar? Visite
www.southoaklandshelter.org/give
donde sus donaciones pueden marcar una gran diferencia para nuestros vecinos necesitados de vivienda asequible.
